Museo Nacional de Arte

El descubrimiento del pulque,




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El descubrimiento del pulque,

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El descubrimiento del pulque,

Artista: JOSÉ MARÍA OBREGÓN   (1832 - 1902)

Fecha: 1869
Técnica: Óleo sobre tela
Tipo de objeto: Pintura
Créditos: Museo Nacional de Arte, INBA Acervo Constitutivo, 1982
Descripción

: Imagen localizada en el catálogo de la exposición página 19

Descripción:

"Siempre según la versión conservadora de Roa Bárcena, el episodio del ofrecimiento del pulque que vino a marcar el inicio de la decadencia de la monarquía tolteca, agravada todavía más durante el reinado de Topiltzin, quien no fue otro que aquel hijo que Tecpalcatzin engendró en la clandestinidad, luego de cambiar de nombre. Lo interesante del cuadro de Obregón, pintado cuando ya circulaban los textos de Roa, es el hecho de soslayar toda referencia a las facetas perturbadoras de esta leyenda. Se trata de evocar la noción de una "edad de oro" autóctona, mediante deliberadas referencias visuales a una belleza y una armonía de linaje clasicista. Quizá no sea indiferente a semejante propósito el hecho de que la esposa del comitente, doña Susana Robert de Sánchez Solís, parece haber formado parte de una rica familia de hacendados pulqueros. No por acaso, la composición de José Obregón se convirtió en una suerte de emblema del poderío de esta casta, y se le encuentra reproducida en no pocos cascos de hacienda de las regiones donde se cultiva el maguey". 

(Ramírez, Fausto, 2003, p. 70)

Descripción

: Imagen localizada en el catálogo de la exposición página 19

Descripción:

"Siempre según la versión conservadora de Roa Bárcena, el episodio del ofrecimiento del pulque que vino a marcar el inicio de la decadencia de la monarquía tolteca, agravada todavía más durante el reinado de Topiltzin, quien no fue otro que aquel hijo que Tecpalcatzin engendró en la clandestinidad, luego de cambiar de nombre. Lo interesante del cuadro de Obregón, pintado cuando ya circulaban los textos de Roa, es el hecho de soslayar toda referencia a las facetas perturbadoras de esta leyenda. Se trata de evocar la noción de una "edad de oro" autóctona, mediante deliberadas referencias visuales a una belleza y una armonía de linaje clasicista. Quizá no sea indiferente a semejante propósito el hecho de que la esposa del comitente, doña Susana Robert de Sánchez Solís, parece haber formado parte de una rica familia de hacendados pulqueros. No por acaso, la composición de José Obregón se convirtió en una suerte de emblema del poderío de esta casta, y se le encuentra reproducida en no pocos cascos de hacienda de las regiones donde se cultiva el maguey". 

(Ramírez, Fausto, 2003, p. 70)