En la década de los años treinta, el artista jalisciense Jorge González Camarena realizó un grupo de pinturas de carácter decorativo dada su formación de ilustrador. ¿ Esta obra concreta la utilización de los tipos populares combinados con el lenguaje pictórico del futurismo y el cubismo, lo cual se advierte en la pincelada puntillista, las amplias gamas de color y la yuxtaposición de diferentes formas geométricas como los motivos circulares. Así mismo, cabe mencionar que el paisaje, la fauna, las costumbres y ciertos estereotipos femeninos mexicanos -como justamente fueron las representaciones de las tehuanas- contribuyeron a la edificación de una iconografía nacionalista. ¿ La tehuana sostiene con su mano izquierda al ave, signo de un trópico idealizado. También sostiene una cornucopia, símbolo de abundancia y fertilidad, acorde con el exotismo del paisaje expresado en las palmeras frondosas y los recursos naturales exuberantes. Por su parte, la mujer, de belleza refinada, ojos grandes y labios delineados, viste la típica indumentaria istmeña: el huipil con los olanes blancos sobre su cabeza. ¿ El perico se convierte así en una metáfora moderna de un paraíso terrenal recuperado, apoyándose al mismo tiempo en la idea mítica de la tierra como encarnación de la patria. ¿ Fue realizada para los estudios Cornejo, como se indica en la firma; esto demuestra el nexo que tuvo el pintor con empresas publicitarias. ¿ La obra ingresó al MUNAL como donación del Patronato del Museo Nacional de Arte, A.C., en el año 1993.
Dafne Cruz Porchini