En 1940, en el margen de la Exposición Internacional del Surrealismo que se presentó en la ciudad de México, Diego Rivera exhibió dos pinturas realizadas en 1939. ¿ Años más tarde, en 1947, el artista guanajuatense ejecutó a la manera surrealista Las tentaciones de san Antonio -título que alude al ermitaño egipcio nacido en el año 251, quien a través del ayuno, la oración y la meditación buscó la santidad, a pesar de las imágenes impuras con las que el demonio lo tentaba-; en ella, la humanización de los tubérculos tal vez esté ligada a la leyenda medieval de la mandrágora, planta afrodisíaca con forma humana, que al arrancarse de la tierra gritaba y quien la escuchaba podía volverse loco o morir. ¿ Sin embargo, la iconografía seguramente se remita a la tradicional fiesta decembrina oaxaqueña donde los concursantes realizan composiciones escultóricas con rábanos. ¿ Cabe mencionar que en 1946 Diego Rivera realizó La noche de los rábanos, una acuarela en la que representa esta verdura como la metáfora del demonio con tridente, cuernos y cabalgando sobre una forma fálica; la misma figura que con ligeras variantes pintó un año después en Las tentaciones de san Antonio. ¿ En el óleo, la analogía de san Antonio se distingue en el ángulo inferior derecho, donde el religioso, recostado y con los brazos en alto a manera de barrera, se protege contra la provocación de las sensuales, seductoras y amenazantes figuras con alto contenido erótico. ¿ Las formas, la paleta cromática, la luz y los contrastes logran crear en la composición un microcosmos pleno de fantasía e imaginación. ¿ Esta obra se integró MUNAL en 1982, dentro del lote constitutivo de la colección.
Ana Celia Villagómez